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Culo veo... ¡culo quiero!

Empezando el año...

Empezando el año...

Qué ingrato es ser futuro padre... no solo debo estar pendiente de mimar y atender las necesidades de mi cónyuge (sí, estoy acostumbrándome a llamarla "mi cónyuge"... el término "mi esposa" ahora es ilegal, o como mínimo, políticamente incorrecto), sino que debo también aguantar que todo el mundo la mime a ella.
Es muy duro... ¡empiezo a sentir celos!
Cada vez que nos cruzamos con algún conocido, siempre tengo que tragar la misma retahíla de piropos y halagos hacia mi pareja:
-"Qué guapa estás..."
-"Está estupenda..."
-"Qué barriguita más graciosa"
¿Y yo qué? ¿Yo no tengo una graciosa barriguita? ¿No estoy estupendo? ¡Que yo también he puesto algo!. Empiezo a comprender a los primogénitos, cuando sus padres tienen al segundo. Todo bicho viviente pendiente del bebé, y ellos, que empiezan a hablar, caminar y hacer gracias, pasan completamente desapercibidos.
Y luego están los sobones, a acariciar la tripita de mi parienta (imagino que parienta se puede decir), con delicadeza eso sí, mientras ponen caras de ternura y éxtasis y sueltan un "¡Oooooooh...!"
Leñe... ¿y yo qué? ¿Por qué no me acaricias la zona fecundadora con ternura mientras pones cara de éxtasis y dices "¡Ooooooooh!?"
De todas formas, estos no son los peores, en realidad lo hacen por demostrar el cariño y simpatía que sienten por nosotros, y darnos a entender que, llegado el momento, se harán cargo del bebé cualquier sábado que nosotros queramos salir de copas. Se que en un futuro podré contar con ellos incondicionalmente.
Alguien que acaricia la barriga de mi partenaire, inspira la confianza suficiente para eso, ¡como mínimo! Con lo cual, podré salir todos los findes en cuanto nazca, a cambio de putear los sábados de mis amigos.


Independientemente de saber que mi optimismo es exagerado, obviamente prefiero a la gente que se tomas esas confianzas con la barriga ajena, a los agoreros que empiezan a contarte las desgracias anónimas, como si de ésta manera te estuvieran haciendo un favor:
-"Pues a la prima del vecino de mi madre le dió un soponcio por la subida de la hipoteca y perdió al niño cuando ya estaba de seis meses..."
-"¿Sigues trabajando? Noooooo... tu pídete la baja que la nuera de la tía abuela de Zetanito, se hizo un corte en la lengua cerrando un sobre, se mareó al ver la sangre, y calló con tan mala fortuna que los trillizos que esperaba se golpearon la cabeza entre sí, y nacieron como Forrest Gump..."
Esa gente se merece un premio: Una patada con botas de seguridad de puntera acerada en la rabadilla (lo cierto es que desearía haber dicho en "tó el coño", pero reconozco que queda feo). No obstante me limito a agradecerles el comentario:
-"Es bueno saberlo Pili, tendré en cuenta esas tiernas, simpáticas y delicadas anécdotas."
Y esa noche Pili, seguramente dormirá satisfecha de su buena obra, y si algún desgraciado día (Dios no lo quiera), se cumple alguna de sus fatídicas predicciones, será mejor que Pili no venga a recordarnos que nos lo advirtió, porque ese día llevaré botas con puntera de acero.


De cualquier manera, también hay cabida para las muestras de alegría mostradas por la familia... éstos sí que felicitan también al padre, aunque empeñados en tener un varón en la familia, ya le habían bautizado anticipadamente y costará trabajo enseñar a mis sobrinas que "la tita no trae al primo Pepito en la tripita". La suegra por supuesto es la primera en aceptarlo con alegría, y nunca falla a su tradición (puñetera manía más bien) de subir la ropa de su hija (ojo, aunque te pille en el portal de la casa) para besar escandalosamente a la que será su futura nieta. Afortunadamente no hace lo propio con la zona fecundadora del yerno…


La ilusión de un futuro padre imagino que sólo puede ser comparable con la del que ya lo es, pero me reafirmo: es bastante duro. Espero que su dureza no acepte la misma comparación, porque entonces, la que me espera dentro de unos meses es de órdago.

¿A quién pretendo engañar? Me queda lo mejor… pero está claro ¡que también me queda lo peor!

 

En todo ésto, se me ha olvidado felicitar el año, pero imagino que estaréis hartos de frases navideñas.

3 comentarios

c-tor -

Me hubiera gustado bajar al sur un rato Mr. Deditos, y más teniendo en cuenta que al final mi hermana no se he presentado. De hecho si no hubiera sido por el constipado que pillé hubiera ido a las rebajas.
Por cierto, aprende del Belushy... eso es un amigo, dispuesto a sobar y dar ánimos.

No es necesario que me pronostiques lo que me espera, de hecho ya he anulado el dormitorio de invitados y estoy ensayando excusas para echar a la gente (¡¡¡muhahahahahahahahaha...!).

mr deditos -

Ahora ya sé por qué no has querido quedar conmigo estas Navidades. Para que no le palpe la barriguita a tu esposa (jeje). Desde luego a tí, la zona fecundadora como que no.

Si quieres te desanimo un poco y te cuento lo que pasa después del parto....
O mejor no, no vaya a ser que te deprimas más.

Por cierto, feliz año.

belushy -

Tu tranquilo jose... que si algún dia nos vemos... me tomaré la confianza de palparte la barriguita... o si lo prefieres la zona fecundadora... Me he partío de risa mamón....